EL ROBO DEL SIGLO

TRIBUNA

Tras el robo al Museo se abren infinitas hipótesis sobre quiénes fueron los autores. Sin dudas alguien metió mano, pero el autor intelectual sigue siendo la desidia dirigencial, el abandono y vaciamiento sostenido del club. El Veedor acerca detalles increíbles…

En el barrio Bajo Flores, ni trapos ni telones, los trofeos están a salvo, de los dirigentes vaciadores.

La carta que dejaron los cacos eriza la piel. La historia es increíble. Si bien aún no hay certezas de quiénes son los responsables del delito, imagino que no debe ser muy difícil averiguar quiénes son los irresponsables que lo permitieron. Tratando de buscar información, llamé a mi amigo uruguayo Luis Vitette. El tipo es rápido como pocos, “fue un dirigente”, me dijo… Me cuesta creerlo. 

¿Por qué robarían el Museo del Club?, pensé en voz alta. “Porque ya vaciaron la caja del Club”, respondió.

Traté de explicarle que solo se llevaron un par de Copas antiguas y hasta un segundo puesto, pero el uruguayo subió el nivel de argumentación… “fíjate que se llevaron trofeos profesionales, de plata labrada, no se llevaron la mugre amateur, son chorros pero no boludos”. Buen punto, son trofeos que alimentan nuestra grandeza, y no esos que solo sirven para que roñosos, crotos y académicos se borden estrellas de hojalata en Twitter. Sin embargo es una acusación que no me animo a sostener. Luego continuó, “raro que no se llevaron ningún título moderno, no sé, del último lustro…”. Me dio vergüenza decirle que no ganamos nada en ese lapso, le mentí, le dije que también se llevaron el segundo puesto de la Recopa pero el uruguayo es una luz… “esa te la robó el Rodo, botija… no te olvides que a Pitana y Delfino los manejaba la banda de Don Julio…” . Me cagó, el tipo maneja información calificada. 

Me dijo que averigüe bien, pero que él cree que una semana antes habían intentado ingresar por medio de un túnel. Según su información, dos tipos habrían cavado un pozo profundo en la Ciudad Deportiva para iniciar un camino bajo tierra pero se toparon con una laguna subterránea, casi mueren ahogados y desistieron del plan. Le tuve que explicar que eso no fue un intento de robo, eso es abandono del club, pozos, pastizales, falta de agua, es para otra charla… Vitette levantó los hombros y se apoyó en la duda. No es fácil torcerle sus ideas. Al toque me preguntó por el frasco con la abeja, la que cuida el Guardián. Me sorprendió, no sabía que el museo tenía un Guardián. “¿Y la bicicleta de Abdo? ¿La dejaron? Estaba al lado del frasco con la abeja y una porción de torta del Centenario, una servilleta con baba de Savino y el cuchillo que tocó Tinelli cuando la cortó…”. Tras esto comencé a sospechar que Vitette estaba confundiendo el Museo de SL con el MMS (Museo de Miserias Savinistas). 

Le cambié el tema, le dije que la zona no ayudaba. Que ya hace rato nos habían robado los plasmas de las cabinas de transmisión y que en Boedo esto no pasaría. No me sorprendió que me diera la razón, es casi una obviedad, pero fue una sorpresa que recuerde lo siguiente… “¿No fue De Boedo Vengo que presentó el primer proyecto para la vuelta a Boedo en tres etapas? Yo en esa época estaba con el tema del Banco Río pero recuerdo que ustedes hablaban de construir una biblioteca y un Museo en el primer piso de la sede de Avenida La Plata. Estaba fabuloso, si les hubieran hecho caso nada de esto hubiera pasado…”. Tiene razón, el Proyecto La Gloriosa contemplaba el museo en Boedo, en un primer piso pero tuve que ser honesto y ponerlo en contexto, “ahora eso es imposible, hay que levantar doce palos de deuda, construir cocheras para el mercado, un colegio, una sala sanitaria, una taquera y espacios verdes antes de poner una butaca…”. Vitette se quedó pensando un rato… “el que acordó todo eso odia a San Lorenzo”, me dijo reflexivo, y me dejó un ejercicio que todavía trato de resolver…. “Armate dos listas, en una poné todo lo que se llevaron y en la otra las cosas que dejaron… tal vez así consigas poner blanco sobre negro y salte una pista a la luz»…

Terminé la llamada, quedamos en comer un chivito juntos en Montevideo, coincidimos que no sería fácil recuperar la identidad histórica ni las piezas robadas, pero si somos pillos le sumamos cincuenta dólares por cabeza a los veinte mil buenos tipos que van a poner cinco mil gringas para la construcción del estadio, total, poner cinco mil o cinco mil cincuenta es lo mismo,  digo yo que hago planes con la guita de otros y que no sé de qué vivo ni lo que cuesta ganarla, se entiende… 

A continuación, les dejo el listado que fui armando. Si saben de otros objetos que fueron robados, o abandonados, agradezco su colaboración… Tira mierdas abstenerse, no entorpezcan la investigación. Gracias.

Objetos robados del museo:

Trofeo de Liga 1936: Algunos señalan a Moretti. Dicen que lo ganó él y le pertenece. Pero yo no creo eso. Es cierto que Lammens se adueñó de la Libertadores y la paseaba en el baúl del auto, pero Moretti no.

Trofeo Segundo Puesto 1936: Hay dos hipótesis, una es que buscaban la copa de segundo puesto del Mundial de Clubes y le erraron. Otra es que preferían llevarse cualquier poronga antes que un título amateur.

Trofeo Campeón Liga 1946: Hay tibias sospechas de que haya algún interés numérico con los campeones en años terminados en seis. Flojo argumento. Otros apuntan a la colectividad gallega en Argentina. No se bancaron la gira del 46 ni que les hayamos enseñado a jugar al fútbol, como narra la mitología cuerva. 

La Bicicleta de Abdo: Otra vez hay dos teorías que bifurcan la información, una es que la usaron para escapar. Otra es que fue Shakira, quien ya había anticipado en una de sus letras mas famosas “óyeme Carlos llévame en tu bicicleta…”. Ojo con esto. 

La cama del Pampa Biaggio: En realidad era un catre que subieron de la pensión, de la época difícil del ídolo del 95. Parece que confundieron el catre buscando la cama que le construyó Romagnoli a Guede, artesanal, carísima. 

El Sorteo del Triangular: Todos los cañones apuntan a Juan Ramírez, el ídolo de Sabella, que cuando pasó a Boca acordó llevarlo para que se luzca donde debe estar, junto al busto de Pompilio.

El Frasco con la Abeja: Supuestamente es el único objeto que tenía un Guardián a cargo. No me sale el nombre del figurón pero está en todas las fotos, no falla. 

Las Copas que Ganó Gorosito: Pero no ganó ningu… LAS COPAS QUE GANÓ GOROSITO. Punto.

Objetos que se salvaron:

Un desodorante: No se sabe de quién es pero se sospecha. 

La Biblioteca de Soso: Como no ganó nada, y se sentía culpable, dejó una biblioteca con algunos libros para el plantel, La Insoportable levedad del ser (sanlorencista), Azabache (cuenta la historia de un caballo, varios burros del plantel se identificaron mucho), Mujercitas (el preferido de Pittón, tipo sensible), El Principito (cuenta la historia de Osvaldo Príncipi cuando era niño) y algunas Selecciones de Reader’s Digest.

Afiche primer festejo del día del hincha: Los cacos entendieron que aquella celebración por impedir un gerenciamiento carece de valor en un Club que privatizaron de manera encubierta. Irónicos, lo dejaron para que algunos traidores que hoy firman los balances del vaciamiento económico de San Lorenzo lo miren de vez en cuando y revienten por dentro cuando recuerden lo que supieron ser y lo que ahora son. 

Trofeo Campeonato Económico de Savino: Quizás porque sabían que fue una mentira, o quizás porque entendían que no tuvo valor, dejaron ahí en la estantería, una de las obras maestras del Savinismo. Ojo, que Arreceygor va por el bicampeonato, y ya sabemos que el primero terminó en convocatoria de acreedores.

Master Plan Estadio Avenida La Plata 2016: Ahí en el piso, entre unas sillas que habrán revoleado en pleno atraco, estaba el Master Plan que había soñado Lammens cuando prometió construir un estadio en 2016. Tenía 2 hojas. Y estaban en blanco. Aparentemente fue la pieza instrumental que dio nacimiento a su proyecto de Ingeniería Financiera y Economía Paralela que aplicara durante la última década y que juntó la módica suma de cero pesos con cero centavos para la construcción de la futura cancha en Avenida La Plata

Monetti: Sentado en una esquina, ahí dejaron a este salame vestido de sereno. Se le arrimó una carpeta con fotos de posibles perpetradores del asalto para que señalara algún sospechoso pero el intento fue estéril ya que el hijo de puta no tiene manos. Eso sí, tenía una hermosa sonrisa, porque mientras en San Lorenzo te señalan a los Romero y te cuentan cuánto cobraban, todos esconden la que se llevan tipos como éste por no hacer otra cosa que darle like a los villeros de Lanús. ¿Será que el representante de Monetti es amigo?¿Será que el del museo no es el único robo a San Lorenzo?

Una pila de cheques: Chorros, pero no boludos. Al ladito del campeonato económico de Savino estaban prolijamente ordenados 55 cheques de San Lorenzo de Almagro por la suma de 800 millones de pesos. ¿Para qué se los iban a llevar si nunca los iban a cobrar?

La lista sigue. Con el correr de los días aparecerán más detalles. Pero a esta altura, el Museo es solo una piedra más en este tropezar constante en que se ha convertido nuestro presente.

AUTOR: El Veedor Azulgrana

Narrador de realidades que superan la ficción. Detractor del siga siga y enemigo del todo pasa. Deconstruyendo al sanlorencista de ley.

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