En poco más de 10 días ganamos dos partidos, rescindió Melano, cumplieron 200 partidos en el club Torrico y Ortigoza y conseguimos la ley necesaria para encarar con seriedad la construcción del Estadio en Av. La Plata, que nos devolverá definitivamente al lugar que nos corresponde. Fueron días hermosos en esta vorágine que nos presenta San Lorenzo y no siempre nos trata tan bien (de hecho, la primaverita futbolística fue muy efímera).
Sin embargo, amparados en ese clima de buena onda que reinó unos días, donde nos encontrábamos “vibrando alto” (como querría el Presidente licenciado), parece que algunos quisieron aprovechar para pedir que hagamos borrón y cuenta nueva.
Así, en un primer momento, pudimos leer a varios partidarios publicar voces anónimas que les contaban cómo se hacía “todo mal” y ahora se hace “todo bien”. Sin embargo, no tuvimos detalles sobre semejantes declaraciones.
Así, encontramos dirigentes festejando públicamente la rescisión del intrascendente delantero que ellos mismos trajeron (e hicieron jugar) y contando que la maqueta con la cual nos hicieron posar y emocionarnos hace pocos meses era una farsa, un mero requisito para que salga la ley (algo que obviamente no nos blanquearon), poniendo en evidencia que no hay un proyecto concreto de estadio que estén encarando.
Así, celebraron la participación de los/as socios/as en el mantenimiento de las instalaciones del club los mismos que deberían explicar cuánto más nos van a pedir que hagamos por amor al club, sin un solo gesto en este año y medio de pandemia pagando la cuota (que ya aumentaron), mientras sus oficinas y palcos se renuevan.
Así, quienes hoy nos dicen que deben mejorar la comunicación con los socios son los mismos que en el año 2017, con bombos y platillos anunciaron el lanzamiento del Portal CASLA Transparente (escribo sobre esto y siento que es un chiste, pero no), una herramienta que, de haber sido encarada con seriedad, nos hubiera permitido seguir el declive de la dirigencia, entenderlo y hacer responsable a quienes corresponde. Hoy, lógicamente, esa web ya no existe.
Así, los que nos vendían que teníamos un club europeo, que no nos podíamos quejar, los que nos exigían memoria y agradecimiento, hoy nos dicen que debemos ser austeros y comprensivos de una economía delicada.
Esta gente que hoy dice participar de una “gestión diferente” resulta ser la misma hace años. La misma que aparece para las fotos y desaparece a la hora de dar explicaciones. La que se cuelga las medallas pero se ofusca con los cuestionamientos. Ellos y nosotros somos los mismos de siempre, pero nosotros tenemos mucha memoria.
