¿CUÁL ES EL PROYECTO?

FUTBOL JUVENIL

La preventa de Angelito al Atlético de Madrid en un valor irrisorio para semejante crack. La mala negociación con Kannemann que terminó en su salida del Club. La cesión de Villalba a Boca como parte de pago del 50% de Blandi. Los juveniles campeones de la séptima y quinta prácticamente no tienen lugar y varios otros que mostraron condiciones fueron cedidos a préstamo. ¿Cuál es el real proyecto de inferiores?

Correa, Kannemann y Villalba. Todos llegaron de pibes. Todos hicieron el recorrido por las inferiores y hasta se dieron el lujo de, en algunos casos, dar una vuelta olímpica en las juveniles del Club. Todos después fueron campeones en Primera, del torneo local y de América.

La trascendencia que tomaron en Primera División debiera haber sido utilizada de ejemplo como norte para los niños que se acercan a las juveniles de San Lorenzo. Pero lejos de optimizar las condiciones para disfrutarlos en el Ciclón, todos se fueron y ninguno de la mejor manera.

Angelito, apenas 50 partidos, se fue antes de cumplir los 20 años. Villalba, con 100 partidos, se va con 21 años. Walter, el “más viejo” en consolidarse, no llegó a los 75 partidos y se fue a los 23 años.

El crack rosarino, clave en el Campeón 2013 e importante en la Libertadores 2014, fue pre-vendido al Atlético Madrid y nunca supimos bien por qué se lo “reservaron” a los españoles, casi sacándolo del mercado. Mucho menos se informó de manera clara cuánto finalmente lo pagaron, o si efectivamente lo pagaron, ni qué pasó con los 2 famosos amistosos que se debían organizar como parte de la transferencia. Y de lo que le pasó en el corazón mejor ni preguntar, porque todavía nadie explicó en qué falló San Lorenzo como para que su afección cardíaca recién se descubra en los controles que se le hicieron en Europa.

Walter apareció para salvarnos de la B. Campeón en 2013, fue elegido como mejor lateral izquierdo del torneo en las encuestas de TyC Sports y Clarín pero, sin embargo, le trajeron a Emmanuel Mas para suplantarlo. En la Libertadores jugó poco y con la salida de Gentileti se consolidó en la zaga central, al punto de terminar corriéndose de 2 en el Mundial de Clubes cuando todo indicaba que el “experimentado” Yepes (a quien también trajeron para suplantarlo) tenía el oficio para ser quien se corriera al sector derecho. La falta de confianza en sus aptitudes para ser titular indiscutido y la mala negociación de su continuidad derivaron en su pronta salida por apenas 1 millón de dólares al Atlas de México.

Villalba se hizo importante en el San Lorenzo de Pizzi cuando Jara y Stracqualursi nos estaban mandando a la promoción. Su ingreso y el de Correa fueron el aire que le permitió al equipo repuntar y sumar 30 puntos. Se consolidó en la Primera al punto de ser titular tanto en el Campeón 2013 y la Libertadores 2014. En el 2015 del subcampeonato con Boca fue titular como volante por derecha, siendo el máximo goleador de los mediocampistas del plantel. Con la llegada de Guede perdió terreno y ahora se iría a Boca como parte de pago por el 50% de Nicolás Blandi.

Es cierto que es fútbol y que es todo materia opinable. Algunos podrán valorar más, menos o nada a cada uno de los anteriormente mencionados. De hecho a todos en algún momento el hincha de San Lorenzo los criticó. A Correa por “lagunero”, por “desaparecer”. A Kannemann por su “vehemencia” y estar “cerca de la roja” (por más que registró sólo 2 expulsiones). A Villalba por “no levantar la cabeza” y ser un “autito chocador”. Claro que mientras tanto le daban un voto de confianza a los Cetto, Fontanini, Yepes, Díaz, Franco, Prosperi, Blanquito, Barrientos, Elizari, Cavallaro, etc. De eso también hay que hacerse cargo. El hincha tiene mucho que ver en esto.

Un buen proyecto de inferiores no sólo implica sacar jugadores con capacidad para representar a la Institución en Primera División sino, además, bancarlos si pasan un mal momento y asegurarles un lugar de importancia en los planteles si ya dieron muestra de saber estar a la altura de las circunstancias cuando fueron llamados a defender la azulgrana. Porque después aparecen los “patineta Rodríguez” que hacen carreras de 10 años en Europa, o los despreciados Montillos que se convierten en ídolos del fútbol en Brasil y llegan hasta la Selección Mayor, o los “burros” como Ulloa que en cada Club al que fueron meten goles. Y encima después nos preguntamos por qué no vuelven a San Lorenzo a terminar su carrera.

En los últimos años San Lorenzo tuvo campeones de quinta y séptima división que nunca lograron afianzarse como alternativas en un plantel de Primera División. Sólo por nombrar un par de casos, a Devecchi le trajeron un arquerito colombiano, a Mieres lo relegaron incluso por detrás de tipos como Prosperi, a Ibañez le trajeron un Quignón que tampoco juega, a Marcos Senesi le trajeron el colombiano Franco que por suerte no duró ni 4 meses en el Club,  Rodrigo Contreras fue una y otra vez prestado a otros equipos. De los que hoy podrían ser alternativa hay que nombrar a los cedidos Montagna y Esparza, que quizás no lleguen a ser cracks pero que de ninguna manera rinden menos que los Blanquito o Cauteruccios inventados de volantes por izquierda. Y luego la lista se completa con muchos que “quedaron en el camino” por más que brillaron en sus respectivas categorías, como Rodrigo Holgado, Santiago Camacho, Lautaro Carrachino, Robertino Insúa y la lista sigue. ¿Ninguno con pasta para la Primera?¿O tipos que al no tener oportunidades después se diluyen en el anonimato del fútbol underground? Cualquiera sea la respuesta a estas dos preguntas, el error sigue siendo formativo. El error sigue siendo de San Lorenzo.

Por eso nos preguntamos, ¿cuál es el proyecto de inferiores del Club?¿Existe?¿Cuándo lo vamos a ver plasmado?

Lamentamos la partida de Villalba. Por el cómo, por el cuándo. Y mucho más por el destino. Todo lo que en su momento soñamos para el pibe lo hicimos imaginándolo con la azulgrana en el pecho, y ahora encima, vestirá esos inmundos colores. Un Club que siempre nos ventajeó y que para asegurar la reelección de Angelici se robó el torneo en 2015 ahora contará con uno de los nuestros como refuerzo.

Cuesta desearle lo mejor así, pero igual lo hacemos. Porque fue clave para no volver a caer en promoción. Porque fue campeón. Y porque nos dio la Copa. Y porque en 2015 fue uno de los mejores del subcampeón. Gracias por tanto. Y suerte. 

AUTOR: De Boedo Vengo

Agrupación de socios de San Lorenzo fundada en Julio del año 2000 con la convicción de un San Lorenzo más grande, movilizado, en Boedo y como una Asociación Civil Sin Fines de Lucro.

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