LA PRIMERA MEDIDA
La primera vez que tomé whisky fue con hielo. Muchísimo hielo. Cualquier tomador de cierta experiencia me hubiese reprendido, pero para pasar el Jameson que me sirvieron esa noche a mis jovencísimos 16 años, lo necesité. Es que el agua, al pasar de su estado sólido a líquido, se mezcla con el brebaje y rebaja […]
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