EL OTRO BALANCE

INSTITUCIONAL

Arranca diciembre, se vislumbra el final del año, nos ponemos un poco sensibles y comenzamos a reflexionar acerca de lo que nos deja el 2021 y lo que esperamos para el año próximo. A lo largo de este mes nos vamos a ver obligados/as a leer en las redes sociales los distintos balances de quienes nos rodean. Yo no voy a ser la excepción.

En el ámbito futbolístico, la pobreza está a la vista: en las últimas semanas prendimos velas para que Arsenal no gane, sacar algún punto más y no terminar últimos por primera vez en la historia. Insólito objetivo para un equipo grande. Seguimos bajo el mando (ponele) de un incapaz, que además es vigilante, “porque no queda otra”, pero parece que arrancaron, ahora sí, las reuniones con distintos DTs. Sería lindo escuchar con qué piensan tentarlos. 

En este sentido, sin embargo, no podemos dejar de destacar que ahora el grupo debe estar contento y unido, llegando todos a horario y comiendo asados, porque si están todos unidos es más fácil y que las vedettes vayan al teatro. ¿Se traduce eso en buenos resultados? No. ¿Vemos algún tipo de proyección de esta armonía en el juego? Tampoco. ¿Cuándo le toca al hincha estar contento? No sabemos, por ahora tenemos esto. Ojo, lideramos la tabla de expulsados. 

En cuanto a la dirigencia, ¿qué decir que no hayamos dicho hasta ahora? Me apena tener que repetirme. El Licenciado sigue especulando con su vuelta, como si el club fuera el patio de su casa. Se supone que ahora que se termina el programa ya no hay conflicto de intereses y podría dedicarse de lleno al cargo para el que fue electo. En ese caso, me pregunto: ¿piensa dejar la TV hasta el final de su mandato o renovará la licencia el año que viene? Quizás esa respuesta me la den los escasos puntos de rating y no el compromiso real de nuestro dirigente.   

Al presidente provisorio ya ni lo vemos (debe haber asumido que nadie lo tomaba en serio); por su parte el Ministro nos llena de frases vacías, intentando despegarse de forma elegante de este presente, porque no puede permitirse que perjudique su imagen y sus proyectos personales. 

Sin embargo, lo importante para mí en este balance apresurado (y después de la hermosa jornada de conmemoración del 30/11) es que la gente se cansó. Que ni “los hinchas de Twitter”, ni los que se expresan en la cancha y en las movilizaciones (que, como ya se habrán dado cuenta, somos los mismos) nos queremos seguir comiendo este garrón. No nos vamos a conformar con ganar penosamente un partido contra un equipo mediocre, ni nos vamos a callar porque nos filmen o nos manden cartas documento. Que los identificamos, a todos los integrantes de la comisión directiva, como lo que son: responsables de la situación del club. Y exigimos que se hagan cargo.

Veremos qué nos deparan los días que nos quedan…

AUTOR: Laura Fiasche

Colaboradora en DBV. Socia de San Lorenzo nro. 9.569. Abogada.

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