BASTA DE NIVELAR PARA ABAJO

INSTITUCIONAL

La aleatoriedad geográfica quiso que San Lorenzo y Huracán sean vecinos. El azar catastral determinó que conformen un “clásico. La historia, sin embargo, se encargó de separar los destinos de uno y otro. Un club despegó rápido, ganó popularidad, se posicionó como un grande y se proyectó al éxito deportivo en casi todas las décadas. El otro, en cambio, quedó condenado a la sombra y a la nostalgia de lo que pudo haber sido.

Acaso esa superioridad abismal en todo aspecto ayude a explicar que muchos cuervos exhiban una extraña manifestación de misericordia por Huracán. En algunos casos extremos, incluso podría hablarse de simpatía. No nos olvidamos, por ejemplo, del Presidente del Club -hoy Vice- que llegó a afirmar que “sin Huracán, San Lorenzo está rengo”, además de opinar que al Ciclón le convenía que el Globo prosperara. “Deseo que a Huracán le vaya bien”, declaró en su momento.

Ni hablar de los que se hacen eco del slogan “Somos rivales, no enemigos”, cuando no somos una cosa ni la otra. Fuera de lo folklórico y en un espacio geográfico bien delimitado, Huracán no tiene el estatus suficiente para ser enemigo de San Lorenzo. Y mucho menos entra en la categoría de rival (un rival es un par, alguien con el que se compite de igual a igual).

¿Y qué decir del “clásico de barrio más grande del mundo”? ¿Acaso Huracán puede atarse a alusiones de grandeza y/o de alcance mundial? Como pretendida estrategia de marketing no le hace ningún favor a San Lorenzo. Nada bueno puede derivarse de intentar vender un producto que nos ligue a Huracán.

Si bien estas aclaraciones son redundantes para la inmensa mayoría de la familia azulgrana, es importante dejar en claro el rol que realmente debiera ocupar para San Lorenzo su “derby barrial en función de sus proyecciones institucionales, sobre todo en tiempos donde algunos ven en Huracán un posible “aliado de marketing o bien una excusa para contentar los ánimos nivelando para abajo.

Desde DeBoedoVengo nunca vamos a aceptar esta concepción quemecuerva. Más de una vez hemos puesto en discusión ciertos lugares comunes que considerábamos necesario desterrar por el bien de San Lorenzo. No casualmente, cuando elaboramos una lista de “Zonceras Azulgranas”, pusimos como número uno a la nivelación hacia abajo que significa darle consideración a Huracán. Una institución a la que, al darle cabida, se le da vida.

La confusión surge, quizás, al considerar que “ningunear (en realidad, darle la entidad que realmente ameritan) a los vecinos equivale a menospreciar parte de la identidad del Ciclón. Como si la pertenencia y el arraigo (temáticas pilares en nuestro análisis y quehacer histórico) de San Lorenzo en Boedo necesariamente implicaran atar nuestra suerte presente y futura a la de los quemeros. Una falsa disyuntiva que se parece mucho al autoboicot.

Más que traer aparejados beneficios, esta propensión al vuelo bajo sólo puede resultar perjudicial para San Lorenzo, un gigante que merece un nivel de exigencia acorde a su envergadura. Y lo merece más que nunca en el vigente contexto de caída en picada, donde parece que nunca tocamos fondo desde lo institucional, lo económico y lo deportivo.

El Pueblo Azulgrana no puede ni debe contentarse con la ventajosa comparación ante el hijo menor, en lugar de profundizar su rol anti-hegemonia riverboquense, en el plano local, y aprovechar la consagración en la Copa Libertadores como cuenta recientemente saldada para volver a crecer y ganar prestigio, en el ámbito internacional.

A Huracán hay que ganarle, como marca la historia, y ya. Es una obligación tácita, incluso en medio de una crisis tan preocupante como la actual. Pero la evocación permanente de un club chico es un lastre que no nos podemos permitir.

Nos parece que este momento, acaso el peor del Club en muchos años, es ideal para reavivar el debate. Por eso recordamos dicha nota.

 

Por Carlos Balboa
Para DEBOEDOVENGO

AUTOR: De Boedo Vengo

Agrupación de socios de San Lorenzo fundada en Julio del año 2000 con la convicción de un San Lorenzo más grande, movilizado, en Boedo y como una Asociación Civil Sin Fines de Lucro.

2 comentarios sobre «BASTA DE NIVELAR PARA ABAJO»

  1. El «clásico» con Huracán es puramente folclórico, barrial, apenas histórico si se quiere; no tiene relevancia en tanto y en cuanto San Lorenzo haga las cosas bien; cuando el club hace las cosas bien, comienza a disputar con River y Boca, porque tiene la espalda popular e histórica para hacerlo ( en esto nos asemejamos a Independiente y Racing; no así a Velez, Estudiantes o los rosarinos, que les falta ese «algo» que San Lorenzo tiene para copar los medios y el debate publico).

    Pero si SL hace las cosas mal, le espera Huracán como ultimo refugio, es decir, si SL actúa como grande se aleja de Huracán, si hace cagadas como las esta haciendo ahora, le espera Huracán.

    Huracán mejoro muchísimo en los últimos 15 o 20 años; la película «El Secreto de sus Ojos», le dio un espaldarazo, como así también tuvieron rebote positivo del éxito masivo en Youtube y en redes, del cancionero audio-visual de San Lorenzo, porque los extranjeros, que no son sonzos, preguntaron: ¿Quién es el clásico?

    Ya esta, los hicimos famosos globalmente por reflejo pero alcanzo su techo: 30 mil personas con toda la furia, alguna copita y una final internacional perdida, no le pidan mas.

    Pero repito: siempre depende de nosotros.

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