SENDEROS DE TRAICIÓN

INSTITUCIONAL

Nueve son los círculos del Infierno que describió Dante. El octavo está reservado a los fraudulentos y el noveno, el más infame de todos, a los traidores. La diferencia básica entre unos y otros, entre fraudulentos y traidores, radica en el vínculo que el victimario tiene con su víctima. No está nada bien dañar a un desconocido, pero todavía peor es hacérselo a un familiar o un amigo. La traición, a diferencia del fraude, no se redime nunca.

Varias son las históricas miserias azulgranas que DeBoedoVengo ha denunciado a lo largo de más de dos décadas. Y sin lugar a dudas, estamos convencidos de que no hay nada peor que el sanlorencista que daña a su propio Club, al amor de sus amores, a la sangre de su sangre. No hay nada peor que ser un traidor. A secas. Porque un traidor no tiene posible redención. “Robarle a San Lorenzo es como robarle a tu madre”, solemos plantear para resumir el concepto. 

Hay quienes traicionan como Judas, por 30 piezas de plata, botín que a la distancia para un traidor puede sonar significativo. Y hay otros que impulsan su deslealtad por réditos mínimos, como por ejemplo los fracasados que te clavan un puñal por un Handy, una sillita en una Asamblea, una entrada de protocolo o un puestito en los oficialismos de turno. De unos y otros, San Lorenzo está repleto. Y algunos, cuando el viento acompañe, la van a pagar. De eso no tengan dudas.

Traiciones inútiles

Todo lo acontecido en relación con la “burbuja sanitaria” que Boca Juniors rompió en Brasil expuso a Marcelo Tinelli, quien expresó vía Twitter, a contramano de lo que impone el Reglamento de la Liga y las medidas sanitarias vigentes, que iba a arbitrar los medios necesarios para intentar cumplir el pedido de Boca de postergar ambos partidos. En otras palabras, el Presidente de San Lorenzo de Almagro -en uso de licencia- dejó asentado, de manera clara, que iba a hacer todo lo posible por conseguirle a Boca un trato diferencial que, a la postre, operara en detrimento de los intereses de nuestro Club. 

Quien supo ser el Rey Midas de la tele y hoy araña 4 puntos de rating no tiene margen para esconderse detrás de su rol de Presidente de la Liga en aras de justificar semejante postura. Y que no se malinterprete; nosotros no pretendemos que desde dicho rol opere a favor de los intereses de San Lorenzo. Entendemos las diferencias entre las funciones que ejerce como Presidente de la Liga y las que no ejerce, y debiera ejercer, como Presidente del Club. Pero es insoslayable en este punto recordar que, en el marco de decisiones de la Liga Profesional de Fútbol, fueron varios los clubes que se vieron obligados a presentar equipos repletos de pibes, en razón de distintas situaciones relativas a la pandemia. Así sucedió sin que jamás haya existido una excepción de ningún tipo. De hecho, en esta reciente cruzada de Tinelli, no hubo un solo club en la Liga Profesional que acompañara su intención de favorecer a Boca. Es decir, que la traición pública de Tinelli ni siquiera le sirvió para juntar las 30 piezas de plata en su objetivo de arrimar vínculos con Ameal para conseguir el negocio de la AFA que es, como todos ya sabemos, su única obsesión. 

Traiciones cruzadas

El segundo traidor de esta historia es el oportunista y acomodaticio Matias Lammens, quien dedica su agenda pura y exclusivamente al Ministerio de Deportes de la Nación. Desde el momento en que se puso en duda que Boca Juniors hubiera roto la burbuja sanitaria en Brasil, la ministra de Salud Carla Vizotti comprometió públicamente a Lammens, manifestando que toda decisión sobre si se habían violado los protocolos sanitarios se iba a tomar junto al Ministro. Sin embargo, jamás se escuchó al actual Vicepresidente testimonial del Club manifestarse al respecto, como tampoco existió comunicado del Ministerio de Deportes.

Es importante recordar en este punto que, en agosto de 2020, cuando San Lorenzo intentaba que los Romero regresaran al país sin realizar cuarentena en la previa del inicio del torneo de fútbol, fue el propio Lammens quien echó por tierra esa posibilidad. Fue el excandidato a protesorero del savinismo residual en las elecciones sanlorencistas de 2010, quien ocupó un rol activo y público a la hora de manifestar que los mellizos debían aislarse. Y lo hizo en un contexto de 2.000 casos diarios de contagios, con menos de 10 muertes por día, sin la actual cepa “Delta” que obliga a redoblar esfuerzos sanitarios. Es decir, que cuando Lammens tuvo que utilizar a San Lorenzo como caso testigo para forzar una mano dura, no lo dudó, y dejó a los mellizos sin entrenar con el Club. Pero ahora, que por su rol e investidura debiera haber asumido el compromiso de dejar expresamente asentado que Boca Juniors no tenía chances de evitar la cuarentena, eligió esconderse, eligió no decir nada. Porque para el Ministro, en su actual rol, ser “severo” con San Lorenzo le sirve políticamente para legitimarse, mientras que hacerse el distraído con Boca no le apareja un daño colateral en su muy bien protegida imagen pública

Como vemos, no son iguales las mezquindades expuestas en esta situación del arribista Matías Lammens y el desorientado Marcelo Tinelli. Sus agendas ya no son las mismas, aunque comparten el modus operandi de siempre: anteponer sus intereses personales por sobre los de San Lorenzo de Almagro. Y en el caso Boca Juniors, sus senderos de traición se han cruzado

Carlos Balboa 

Para DEBOEDOVENGO

AUTOR: De Boedo Vengo

Agrupación de socios de San Lorenzo fundada en Julio del año 2000 con la convicción de un San Lorenzo más grande, movilizado, en Boedo y como una Asociación Civil Sin Fines de Lucro.

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